lunes, 6 de agosto de 2007

Hugo Chávez




Escrito por Ignacio Ramonet en Le Monde Diplomatique.


Pocos Gobiernos en el mundo son objeto de campañas de demolición tan cargadas de odio como Hugo Chávez, presidente de Venezuela. Sus enemigos no han vacilado ante nada: golpe de Estado, huelga petrolera, éxodo de capitales, intentos de atentados... Desde los ataques de Washington contra Fidel Castro no se había visto un ensañamiento semejante en América Latina.


Contra Chávez se divulgan las más miserables calumnias, concebidas por las nuevas oficinas de propaganda -National Endowment for Democracy, Freedom House- financiadas por la Administración del presidente de Estados Unidos George W. Bush. Dotada de recursos financieros ilimitados, esta máquina de difamar manipula repetidores mediáticos (entre ellos los diarios de referencia) y organizaciones de defensa de los derechos humanos, enroladas a su vez al servicio de designios tenebrosos. Sucede también, ruina del socialismo, que parte de la izquierda socialdemócrata sume su voz a este coro de difamadores.

¿Por qué tanto odio? Porque en momentos en que la socialdemocracia pasa en Europa por una crisis de identidad, las circunstancias históricas parecen haber confiado a Chávez la responsabilidad de asumir la conducción a escala internacional de la reinvención de la izquierda. Mientras que en el viejo continente la construcción europea ha tenido como efecto hacer prácticamente imposible toda alternativa al neoliberalismo, en Brasil, Argentina, Bolivia y Ecuador, inspirados por el ejemplo venezolano, se suceden experiencias que mantienen viva la esperanza de realizar la emancipación de los más humildes.


En ese sentido el balance de Chávez es espectacular. Se comprende que se haya convertido en referencia obligada en decenas de países pobres. ¿No ha refundado la nación venezolana sobre una base nueva, legitimada por una nueva Constitución que garantiza el involucramiento popular en el cambio social, siempre dentro del más escrupuloso respeto de la democracia y de todas las libertades? (1). ¿No ha devuelto a unos cinco millones de marginados, entre ellos las poblaciones indígenas, su dignidad de ciudadanos? ¿No ha recuperado la empresa pública Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA)? ¿No ha desprivatizado y devuelto al servicio público la principal empresa de telecomunicaciones del país como así también la empresa de electricidad de Caracas? ¿No ha nacionalizado los campos petrolíferos del Orinoco? Por último, ¿no ha consagrado parte de la renta petrolera a conseguir una autonomía efectiva frente a las instituciones financieras internacionales, y otra al financiamiento de programas sociales?


Más de tres millones de hectáreas de tierra han sido distribuidas entre los campesinos. Millones de niños y adultos han sido alfabetizados. Se han instalado millares de dispensarios médicos en los barrios populares. Decenas de miles de personas sin recursos con afecciones oculares han sido operadas gratuitamente. Los productos alimentarios básicos son subvencionados y ofrecidos a los pobres a precios inferiores en un 42% respecto de los del mercado. La duración del trabajo semanal ha pasado de 44 horas a 36, mientras que el salario mínimo ascendía a 204 euros mensuales (el más alto en América Latina después de Costa Rica).

El resultado de todas estas medidas es que entre 1999 y 2005 la pobreza disminuyó del 42,8% al 33,9% (2), mientras que la población que vive de la economía informal cayó del 53% al 40%. Este retroceso de la pobreza permite sostener con fuerza el crecimiento, que en el curso de los tres últimos años fue de un 12% promedio, entre los más altos del mundo, estimulado por un consumo que ha aumentado un 18% por año (3).

Ante estos resultados, para no hablar de los logrados en política internacional, ¿cabe sorprenderse de que el presidente Hugo Chávez se haya convertido en un hombre contra el cual disparar para los dueños del mundo y sus agentes?


Notas: (1) Las mentiras a propósito de Radio Caracas Televisión acaban de ser desmentidas, dado que esta cadena ha reanudado sus programas por cable y satélite a partir del pasado 16 de julio. (2) Poverty Rates in Venezuela. Getting the Numbers Right , Center for Economic and Policy Research, Washington DC, mayo de 2006. (3) Leer el dossier "Chávez, not so bad for business", Business Week , New York, 21 de junio de 2007.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Bueno Armando cierto es tu enfoque de Chavez, el problema radica en que ha golpeado los intereses de las personas con real.La oposición dice que el pais esta en quiebra, pero hay que anotarse en lista de 2 o 3 meses para comprar un carro ya que las ensambladoras no dan abasto para la demanda y no creo que nadie arriesque el 30% de valor de un carro (la inicial) si no calcula que lo va a pagar.
Dicen que no hay alimentos, pero tu sales a la calle y los consigues, con alguna dificultad, pero yo que lo vivo te digo que no se entiende que los supermercados no tienen algunos productos y a pesar de ello los encuentras en la calle. Lo unico que me preocupa es si se mete con la propiedad privada, ya que no creo que nadie este dispuesto a compartir el sudor de una vida.

A.Quintana dijo...

Cierto, sé que es un artículo que puede traer cola. Pero me llamó mucho la atención estas reflexiones publicadas en un medio tan famoso y por un analista internacional de la envergadura de I Ramonet. Bueno es, me parece también, que estas cosas se divulguen y no solo las que se consideran negativas. PUes también en otros países de América Latina se han censurado medios de comunicación y no ha salido ningún empresario a divulgar dichas noticias. Saludos, A Quintana

juan dijo...

NO SE LA VERDAD QUE PASA EN VENEZUELA , PERO SI LAS NOTICIAS NOSDICEN QUE HA AUMENTADO LA EMIGRACION A OTROS PAISES , QUE HE VISTO MAS VENEZOLANOS EN MEXICO Y NO DIGO DIPLOMATICOS SI NO GENTE COMUN COMO YO ES QUE ALGO PASA ,ES MI OPINION SIN QUERER ENTRAR EN POLEMICA. SALUDOS JUAN CHONG

Unknown dijo...

PARAGUAY: VIDELA SÍ, CHÁVEZ NO
(Publicado en Kaosenlared x Luis Agüero Wagner)
Mientras en los países de la región los Derechos Humanos y la libertad de pensamiento van ganando terreno e incluso sirven de plataforma a los políticos para captar votos, los émulos del senador Mc Carthy en Paraguay, capitaneados por el propietario del diario ABC color Aldo Zucolillo, han retrocedido medio siglo en el tiempo que mide el contexto internacional, en un país en el que sólo basta alejarse unos 15 kilómetros de la capital para volver del mundo contemporáneo a la prehistoria, pasando por el modernismo, la edad media y el mundo antiguo. Es lo que se deduce del desmesurado espacio que vienen dedicando a satanizar a Hugo Chávez y a su política exterior, llegando al extremo de escrachar con fotos e infografías a supuestos simpatizantes paraguayos de la revolución bolivariana.
Nada más natural en un medio donde los políticos que hablan de derechos humanos pierden intención de voto entre el electorado, y la popularidad sube cuando más mano dura prometan.
Para honrar la memoria, debemos puntualizar que no siempre la prensa paraguaya se mostró tan susceptible a las amenazas a las libertades públicas de la región, sobre todo en tiempos en que los dictadores se asemejaban más al prototipo promovido desde el norte que a sus propios pueblos. Nadie se escandalizó en el periodismo libre cuando el General Alfredo Stroessner visitó Venezuela en junio de 1957 para estrechar vínculos con el dictador militar del país caribeño, General Marcos Pérez Jiménez, en tiempos en que ambos subproductos de la política exterior estadounidense concedían graciosamente tajadas del espectro radioeléctrico a sus adulones. Para que no queden dudas sobre el carácter marcial de su visita, Stroessner se alojó en el local del Círculo de las Fuerzas Armadas de Venezuela, en Caracas.
Un par de décadas más tarde, un 20 de abril de 1977, era recibido por Stroessner con los honores correspondientes, el Teniente General Jorge Rafael Videla, quien llegaba al Paraguay acompañado de su esposa Alicia Raquel Hartidge. A la noche se llevó a cabo una recepción de gala en el Palacio de Gobierno de Asunción, donde no faltaron los pundonorosos y austeros luchadores por la libertad de expresión, que aún no habían sido seleccionados por la embajada norteamericana como propagandistas de la democracia tutelada. Es conocido que la National Endowment for Democracy , la USAID y la CIA se abocarían a fabricar entre ellos a bien remunerados disidentes y “luchadores por la democracia” en el crepúsculo del régimen militar paraguayo.
Al conocerse a principios de marzo en Asunción la próxima visita de Videla, ABC color publicaba su recordado editorial donde criticaba al presidente Jimmy Carter por su énfasis en la promoción de los Derechos Humanos y defendía al proceso argentino sentenciando que al presidente norteamericano le era muy fácil pontificar lejos del problema. Por las mismas fechas eran apresados en Asunción Alejandro José Logoluso y Marta Landi, entregados a los sicarios de Videla por las fuerzas represivas paraguayas. Los grupos de tareas de Pastor Coronel tampoco se apiadarían de José Nell, paralítico desde que recibió una bala en los disturbios desatados en Ezeiza por el retorno de Perón.
El 28 de enero de 1999 Hebe de Bonafini pidió a Baltasar Garzón que solicite la extradición del dictador Stroessner, presentando documentos tales como una ficha policial de la Dirección de Registro de Extranjeros paraguayos de la desaparecida argentina Dora Marta Landi Gil, que está fechada en Asunción en marzo de 1977; una tarjeta del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social de Marta Landi, que está registrada en Asunción el 10 de marzo de 1997; y un informe de la policía de Asunción, donde se notifica que Marta Landi (argentina), Alejandro José Logolusso (argentino), José Nell (argentino) y otros han sido expulsados del país. Este informe policial está fechado el 16 de mayo de 1977. Entre los documentos, también destacan un registro de vuelo en el que se acredita que, el 16 de mayo de 1977, el capitán de corbeta José Abdalá, (alias Turco) trasladó a Landi Gil y a su compañero, Alejandro José Logolusso, de Asunción a Buenos Aires.
El destino de todas estas personas, embarcadas en el vuelo del que jamás regresarían, con seguridad poco importan a Zucolillo y otros paladines de la democracia sin chavismo, ayer tan ocupados en recibir las mieles de la proximidad al poder dictatorial, como hoy en sostener su autocomplaciente y fantasmática reputación democrática, aún al precio de buscar sombras en el cuarto oscuro de su conciencia. LUIS AGÜERO WAGNER.